Mediante la iniciativa “Escuchas creativas”, se recogieron las experiencias, preocupaciones e ideas de distintos estudiantes pertenecientes a comunas de la Región Metropolitana, Valparaíso y O’Higgins.

El Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, junto con el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, firmaron un convenio de colaboración para diseñar e implementar a futuro políticas que permitan abordar las problemáticas y desafíos del transporte público, considerando las ideas, experiencias y preocupaciones de distintas niñas, niños y adolescentes del país.

Mediante la iniciativa “Escuchas creativas” de movilidad, realizada durante septiembre, se escucharon las opiniones y visiones de estudiantes pertenecientes a diferentes comunas de la Región Metropolitana, Valparaíso y O’Higgins, quienes a través de actividades lúdicas y creativas entregaron su diagnóstico a los problemas presentes en sus entornos directos.

“A medida que nuestras ciudades crecen, es más importante que todas las personas participen en instancias de diálogos y actividades que permitan activar nuestra imaginación y creatividad. En ese sentido, los niños y niñas de nuestro país tienen mucho que aportar; y por eso quisimos darles un espacio importante para que describieran sus experiencias de movilidad y el uso del tiempo en sus recorridos habituales, reconociendo sus intereses y necesidades”, aseguró el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz, quien explicó también que “este proyecto sirve para identificar los desafíos y brechas que enfrentan los niños y niñas en relación con la movilidad y espacios para transitar de forma más segura”.

Esta alianza colaborativa, es encabezada por las unidades de Movilidad Activa de Sectra; Ciudades Inteligentes de la SIT-UOCT, ambas pertenecientes a Transportes; y por el Centro de Creación (Cecrea) del Ministerio de las Culturas.

Este convenio busca, además, que en un futuro cercano se pueda crear un Observatorio de datos sobre Infancias y Movilidad que permita avanzar en el ámbito de la política pública, la investigación y la toma de decisiones. Esto permitirá disponer de mejor información, proporcionando datos objetivos y actualizados que puedan ayudar a los responsables de la toma de decisiones a comprender las necesidades de las infancias en términos de movilidad, para diseñar planes y programas más efectivos.

Todo este conocimiento, recogido a través de instancias lúdicas de trabajo, permitirá conseguir una mejor planificación urbana y preparar a los territorios para los desafíos de la movilidad sostenible a largo plazo; al proporcionar información sobre cómo diseñar ciudades y comunidades que sean más amigables para las niñas, niños y adolescentes, promoviendo entornos seguros y accesibles para ellos.